Stolen kisses

| No Comments

Buscamos la cercanía del otro siempre que estamos juntos. Una mera caricia, un ligero beso. Tenemos una cierta necesidad a sentirnos. Nos gusta el tacto del otro y nos gusta notar esas caricias muy discretas, casi tímidas.

Esos besos que no están en absoluto previstos, que parecen incluso robados. Estamos en un teatro y es muy incómodo cogerte la mano o que me acaricies la mejilla. Pero lo hacemos, sentimos que es necesario. Es como una droga.

Cantas tan mal, que tengo que callarte con un beso. Un beso robado.

Leave a comment

Powered by Movable Type 4.23-en